Mariana Araujo

le grand termidor Disipada la espesa bruma de la polarización populista, emergió el verdadero soberano de la república posmoderna: la caverna mediática. En el reino donde alguna vez se tocó el pito de la democratización, retumba hoy la matraca de Comodoro Py y una licuadora de periodistas precarizados se puso en marcha. Anatomía de la nueva bestia pop.